22.4.13


Estoy eufórica y emocionada, y sobre todo orgullosa por poder anunciar que he sido uno de los 108 seleccionados en el certamen convocado por Kelonia Editorial para participar en una antología benéfica para el Festival Fantasía Fuenlabrada con un microcuento.

Parece que este curso me voy abriendo camino pasito a pasito, primero con el poema en la revista de la Fundación Jordi Sierra i Fabra y ahora con esto, y me hace sentir que realmente mi trabajo merece la pena. Ya no soy solo yo, o mis allegados, quienes lo valoran, y es una sensación... uffff, magnífica. Me siento muy afortunada y ¡tremendamente feliz!

¡Y aquí tenéis la portada del libro, que es una preciosidad hecha por Leticia Morgado!


Portada de "Historias del Dragón", por Leticia Morgado

Mis felicitaciones a Kelonia Editorial por la iniciativa y por el trabajo tan eficiente que están realizando. Es un placer participar en este proyecto con ellos y, ¡estoy deseando ver los resultados!



17.4.13


Cuando te escribí que necesitaba
el abrigo de tu piel,
no debiste salir huyendo.

Aunque igual no debí firmar
como Hannibal Lecter,
creo.




12.4.13


La última vez que Daniel le pidió a su familia que le ayudasen en su abordaje al barco pirata, nadie le quiso acompañar en su aventura. Daniel no se había dado cuenta de que su hermana mayor, Susana, estaba en la edad en la que prefería pasar las horas muertas delante del ordenador, antes que acompañarle a luchar contra piratas y bucaneros y ayudarle a rescatar a la hermosa hija del almirante.  Su padre estaba trabajando en el despacho, y Daniel sabía bien que no se podía molestar a papá cuando estaba trabajando, o se quedaría sin merienda. Su madre, por otro lado, le había dicho que ya era mayorcito para seguir inventándose esas historias y además, ¿hijo, no tienes deberes que hacer?

Después de enfurruñarse y encerrarse malhumorado en su cuarto, decidió que era lo suficientemente valiente como para hacerlo solo y se coló por la puerta brillante que había aparecido en su habitación, armado con su espada de plástico, por si la cosa se ponía peligrosa.

El otro día, mientras avistaba tierra con su tripulación, se preguntó si papá y mamá estarían preocupados.